Según la ONU, las especies exóticas invasoras son la segunda causa de perdida de biodiversidad en el mundo, y en Europa, una de cada tres especies está en peligro de extinción debido a otras especies invasoras.

La propagación de las especies invasoras se reconoce actualmente como una de las mayores amenazas al bienestar ecológico y económico del planeta. El alga Rugulopterix okamurae, procedente del océano Pacífico, está apartando en nuestro litoral a especies nativas, se multiplica con rapidez y ha colonizado a toda velocidad el litoral mediterráneo de Andalucía y el norte de África.

El alga ha invadido buena parte del estrecho de Gibraltar y la costa andaluza, afectando a espacios protegidos, también se ha detectado en el litoral portugués.

La situación en las playas preocupa por su influencia en el turismo. La imagen de playas cubiertas de alga y el mal olor que dejan son factores negativos para este importante motor de la economía andaluza. Los pescadores también sufren sus consecuencias, sus redes recogen más algas que peces.

Sin intervención de la Junta de Andalucía y el Gobierno de España ni depredadores naturales, y con unos factoreses propicios para su expansión, la Rugulopterix okamurae se extiende sin control por todo el mar mediterráneo y parte de la costa atlántica.

Esta actividad se encuadra en el proyecto de educación para el desarrollo SOSTARIFA y cuenta con la cofinanciación de la Diputación de Cádiz a través de la convocatoria de subvenciones del área de Cooperación Internacional.